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Carlos Sainz durante la sexta etapa del Rally Dakar, que ya se encuentra en territorio boliviano. (Andres Stapff)
La Paz, Bolivia (AP). El español Carlos Sainz ingresó de primero a los Andes bolivianos y ganó el jueves la sexta etapa del Rally Dakar.
Sainz permanece segundo en la clasificación general de automóviles, aunque recortó a 27 minutos la ventaja del líder Stephane Peterhansel.
La sexta etapa se corrió sobre 313 kilómetros cronometrados entre la ciudad peruana de Arequipa y la boliviana de La Paz, bordeando el Lago Titicaca compartido entre ambos países, que está a unos 4.000 metros sobre el nivel del mar.
Sainz ganó la etapa con cuatro minutos de ventaja sobre Peterhansel, ganador de 13 títulos del Dakar. En tercer lugar quedó Nasser Al-Attiyah, campeón del 2015, con cinco minutos de diferencia del primer lugar.
En cuadriciclos, otro argentino se adjudicó la etapa, Jeremías González Ferioli. Se adelantó a su compatriota Pablo Copetti en 1:50 y al paraguayo Nelson Sanabria en 2:18. En el liderato continúa el chileno Ignacio Casale, seguido de Copetti.
El costarricense Cristian Massey llegó en el puesto 40 en la clasificación general de cuadras con un retraso de 1:00:56 horas con respecto al ganador, y en la casilla 12 (penúltimo) de su categoría, la G3.2 2.
En la general acumulada, luego de seis etapas, Massey también es 40, a más de 38 horas de Casale, y en su categoría marcha de duodécimo.
En las motocicletas, el argentino Kevin Benavides trepó al primer puesto de la general al arribar a 30 segundos del ganador de la etapa, el francés Antoine Meo.
Los competidores a su llegada a La Paz, fueron recibidos por el presidente Evo Morales junto con centenares de espectadores.
El Dakar llegó a Bolivia, donde varios sectores de la sociedad realizaban marchas callejeras en contra de un flamante código penal, mientras en otras regiones había esporádicos cortes de rutas.
“El Dakar llega a Bolivia por quinta vez”, saludó en Twitter el presidente Evo Morales.
La llegada del Dakar estuvo precedida de una intensa agitación social en La Paz, por lo que el gobierno dispuso un fuerte control policial a lo largo de la ruta de la competición.
A horas del arribo de los competidores a La Paz, miles de manifestantes protestaban pacíficamente en el centro de la ciudad bajo una intensa lluvia, aunque era improbable que interfirieran en el trayecto de la carrera.
