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Joel Campbell intenta quitarse la marca del jugador de Tigres, Luis Rodríguez, sin embargo otro jugador rival se acerca para dobletear al tico, así fue la marca durante el juego. Fotografía: AP (Refugio Ruiz/AP)
Joel Campbell miró al cielo con sus manos en la cintura. Seguidamente volvió a ver al césped del estadio Nou Camp, luego recibió un saludo del francés André Pierre Gignac y decidió retirarse del campo con mirada perdida, el León del costarricense quedó subcampeón de la Liga MX al perder la final con Tigres.
El atacante al igual que en la ida se esforzó, corrió e intentó por lapsos ser el eje de su escuadra, sin embargo la sólida defensiva impuesta por su rival logró neutralizar cualquier esfuerzo por igualar el resultado de la ida, 1 a 0 a favor de los amarillos.
El partido comenzó con una dinámica buena, en la que el plantel esmeralda apretó desde el pitazo y consiguió tener su primer chance en el primer minuto. El colombiano Yairo Moreno quitó dos marcas, se adentró en el área y metió un centro al segundo palo que Joel no pudo conectar de buena manera para enviar el balón al fondo de la red.
Seguidamente, el nacional tuvo un acercamiento a la puerta defendida por Nahuel Guzmán, no obstante su disparo fue bloqueado por la defensiva cuando ya dejaba sin reacción al guardavallas argentino.
La Fiera intentó por todos los medios conseguir ese tanto que le diera la tranquilidad de igualar, sin embargo cuando no fue una pierna de un defensivo la que frenó el ataque, la retaguardia fue tomada por Nahuel, portero figura de la final.
El arquero argentino de los Tigres le negó la anotación directamente a Rubens Sambueza, también a Jean Meneses y a Vinicio Ángulo. Al primero le ganó un mano a mano, el segundo vio como su remate esquineado fue desviado y el último no pudo vencer con un cabezazo.
León tuvo más del 50% de la posesión del balón, encerró a Tigres pero nunca encontró la llave para abrir el candado. En ocasiones, Joel buscó la individualidad para marcar la diferencia, empero siempre fue víctima de dobleteo en la marca.
De esta forma quedaron atrás los días dorados del León, los 12 triunfos seguidos, también el ser superlíder en la primera fase y la eliminación que le propinó en semifinales al penúltimo monarca, el América.
La temporada para el nacional fue buena, sobre todo porque recobró la regularidad perdida en el último año. El delantero logró sumar 1.398 minutos de 2.070, además marcó cuatro dianas y pudo ser referencia en ataque.
El mundialista de Rusia 2018 llegó a México para conseguir minutos después de que no se sentía cómodo en el Frosinone de Italia, escuadra a la que arribó después de la Copa del Mundo. De hecho como dato curioso ayer el Frosinone descendió a Serie B, mientras Campbell se jugó el cetro en tierras aztecas.
El nacional tiene una cesión con los verdes por un año más, además de una opción de compra, por lo que su estancia en México continuará. Él se nota cómodo y el club está conforme con su aporte en el terreno de juego.
El sueño de un cetro, como el que consiguió con el Olympiacos de Grecia en la temporada 2013-2014, se acabó para Joel y también para un tico. Campbell vivió la misma situación que Hernán Medford en 1997 al quedar subcampeón con León.
El costarricense se demostró que con la Fiera se puede ilusionar en el próximo certamen y así buscar la gloria.
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