Opinión: Wanchope, eso no se le hace al Chiqui Brenes

La decisión de Rándall Brenes de retirarse del fútbol me sorprendió, pero lo que más me sorprende es la postura de Paulo César Wanchope de no contar con el jugador, lo que propicia el fin de su carrera.

Como si Cartaginés tuviera los mejores delanteros del país para deshacerse de Rándall Brenes, lo de Wanchope a todas luces es una pésima decisión.

Giovannie Clunie, el argentino Hernán Fener, el cubano Marcel Hernández, Jossimar Pemberton y Nelson Barahona son las cartas de Wanchope en ofensiva y aún así no quiso contar con el Chiqui.

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Brenes, con más de 100 anotaciones con la camiseta del Cartaginés, solo vistió los colores brumosos en nuestro país, aún cuando fue tentado por Saprissa y Alajuelense, donde pudo ganar más dinero y ser campeón nacional, pero el amor de Brenes por el Cartaginés pesó más y hoy le dieron la espalda.

Wanchope, eso no se le hace a un referente del Cartaginés, quizá el único que tenía en su plantel, el único jugador que los brumosos siempre respaldaron, por el cual dieron dinero para mantenerlo en el club y usted lo manda a un retiro forzado, no deseado y por la puerta de atrás.

Rándall Brenes no se merece que lo retiren después de todo lo que le dio al club y Wanchope no es el único responsable.

La directiva del Cartaginés deja mucho que desear, el presidente Luis Fernando Vargas debió respaldar a un jugador que llegó al equipo a los 13 años y prefirió apoyar a un entrenador que no ha dirigido un partido con los blanquiazules y no saben si va a durar más de seis meses, pues por lo general, en Cartaginés los técnicos son cesados.

El Chiqui se puede ir con la frente muy en alto, le dio todo lo que tuvo un equipo que muchas veces no se mereció a un hombre como Rándall Brenes.

Los traspasos del Chiqui al extranjero ayudaron a que las finanzas del Cartaginés no estén en peores condiciones de las que hoy tienen y ni eso pesó para darle seis meses más. ¿Qué son seis meses para un ídolo?

Un ídolo que llevó los colores del Cartaginés en Brasil 2014, cuando todos lo criticaban y jugó como un grande ante Grecia, con lo que sacaron pecho en todo Cartago y ¿no le podían dar los seis meses más que quería?

Ojalá la apuesta le salga a Paulo César Wanchope y el Cartaginés tenga mejores resultados en la cancha, pues de lo contrario deberán responderle a una afición que ha sufrido mucho; y este es otro golpe...uno muy bajo.

¿Ahora quién será el capitán del Cartaginés?, ¿quién va a salir a dar la cara cuando los resultados no los acompañen?, ¿quién va a calmar un camerino al que le retrasan el salario en todos los torneos?

En síntesis, Paulo César Wanchope y la directiva del Cartaginés se equivocaron con un hombre que les dio más de lo que podía.