El jugador del Saprissa Johan Venegas hizo alarde de su experiencia para superar los obstáculos que se le presentaron en el clásico de anoche en el Morera Soto.
Pese a todas las distracciones vividas, Johan pudo concretar de penal al finalizar el primer tiempo.
El árbitro Ricardo Montero pitó la falta de Kenner Gutiérrez a Rándall Leal al 42′, pero la ejecución de Venegas se dio en el 45+1′.
En esos cuatro minutos, la ansiedad puso a prueba a Johan, pero la domó. El saprissista se amarró su taco derecho mientras recibía los constantes insultos de gran parte de la afición manuda que se encontraba en el estadio.
Tanto así que por cánticos en contra del jugador, Montero tuvo que detener el partido en una ocasión. Y en varias oportunidades, los locutores anunciaron que dejaran de insultar al futbolista sino el juego podría detenerse.
Cuando colocó la pelota en el manchón blanco, el volante José Miguel Cubero cruzó el área para reclamar que el balón estaba mal colocado.
Una vez solucionado eso, el silbatero le comenzó a llamar la atención a Pineda. Lo hizo en dos ocasiones.
Simultáneamente Michael Barrantes se encaraba con Anthony López en los linderos del área y generó un pequeño conato de empujones.
Posterior a todo eso, Montero pitó y Venegas engañó de pierna derecha a Pineda. Concretó el empate.
"Es la experiencia que dan los años, eso no se compra. La gente no entiende y en ocasiones quieren retirar a un jugador de 30 años. Son cosas que uno lee. Los jugadores iban a ser todo lo posible para que esto se extendiera. Uno sabe esas situaciones", comentó Johan.
El morado afirmó que había estudiado con anterioridad a Pineda y por eso mantuvo su calma para tomar la mejor decisión en el cobro.
Sobre los constantes insultos que recibió en el Morera, el futbolista le bajó el tono y expresó que no lo molesta.
“Lo que griten los aficionados a mí me tiene sin cuidado para serle honesto, tengo mi identidad muy bien definida, sé quién soy. Yo sé lo que valgo. Yo juego para mi equipo, para ganar y no caigo en distracciones”, concluyó uno de los mejores hombres saprissistas en el campo.