Limón ha recibido 11 goles en los últimos tres partidos, solamente anotó uno, no sumó puntos y perdió el primer lugar del torneo.
No obstante, los caribeños consideran que tienen la capacidad para enderezar el rumbo de cara a la cuadrangular.
“La verdad el equipo está bastante ilusionado, mentalizado de que podemos ser campeones. Nosotros fuimos protagonistas el 95% del torneo. Nos agarró esta curva de rendimiento descendente y no estamos contentos”, explicó Dexter Lewis.
Los limonenses consideran que el cierre del torneo no les corta opciones de cara a la cuadrangular final, ya que todos los equipos parten de cero y aún pueden optar por una final contra el Saprissa.
Ese es el criterio del entrenador Horacio Esquivel.
“Esperemos que nuestra casa sea fuerte. En casa no perdimos, con excepción del partido que fuimos locales en el Colleya Fonseca contra Herediano; en Limón no perdimos y esperamos que sea nuestra fortaleza”, dijo Esquivel.
Un tercio de los goles que recibió Limón en todo el torneo se dieron en los juegos ante Pérez Zeledón, Herediano y Belén.
Otro de los puntos que menciona el cuerpo técnico de Limón es que el cansancio les ha afectado en estos días, debido a los viajes que debieron emprender para las últimas tres fechas: ir a San Isidro de El General y dos veces a San José.
“El equipo posiblemente está agotado físicamente, no todos los jugadores, pero algunos. Teníamos varios futbolistas golpeados que van a estar para la cuadrangular”, dijo Esquivel.