Fútbol Nacional

Fútbol -Vida

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Como sabemos, el fútbol es una metáfora, una recreación lúdica de la vida. ¿De qué manera? De mil maneras, una de ellas preeminente. En un partido de fútbol, el jugador tiene que estar tomando decisiones a ritmo vertiginoso. Con cada bola que recibe -¡y aun si juega sin balón, y se limita a seguir el curso de la acción!- debe tomar una decisión. El problema es este: solo existe, por definición, por principio, una “mejor decisión”. La demás podrán ser buenas, malas, mediocres, brillantes, desastrosas, pero, en todo caso serán menos que mejores. Porque, de nuevo, “mejor” solo hay una: todas las demás decisiones están por debajo del discernimiento óptimo, y representan una degradación del juego. ¿No es esta, también, la esencia y dinámica de la vida?








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