El exportero Juan Carlos Alfaro tenía mucho tiempo de no emocionarse tanto con un partido de la primera división, pero el del pasado miércoles entre Limón FC y el Herediano tuvo un significado especial para él.
A los 20 minutos del duelo en el Juan Gobán salió expulsado Daniel Cambronero, lo que le abrió la puerta del debut al al hijo del arquero que militó en los años 90 con el Herediano.
Juan Ignacio Alfaro tuvo un debut forzado en su carrera deportiva, pero eso no hará que se borre de su mente su arranque como futbolista profesional, en una historia muy similar a la del debut de su padre hace casi 30 años.
“Mi primer partido a los 18 años fue en Limón y le tocó a él recordarle al papá muchas cosas que habían pasado en ese tiempo. En esa ocasión el partido quedó 1-1, estaba Claudio Jara y mi entrenador era don Orlando de León”,
Juan Carlos no estaba viendo el partido, pues se encontraba trabajando en su puesto como supervisor en la corporación Pipasa, pero con el ingreso de su hijo al campo su celular empezó a sonar.
“Esas cosas uno las presiente, estaba oyendo el partido, dicen que hay un entrevero con Cambronero y pensé que capaz y había salido lesionado. Sin saber pensé que iba a entrar, pero me fui a atender un cliente y después me empezaron a llamar, por lo que entré en esa tensión de papá”,
Alfaro salió con una goleada de 3-0 en contra, pero en ninguno de los goles tuvo resposabilidad, algo que le recalcó su padre, quien lo aconseja para que llegue largo en este deporte.
Con procesos de selecciones menores y con trayectoria en las divisiones inferiores del Herediano, a sus 18 años Juan Ignacio será el encargado de resguardar el marco florense en los próximos dos juegos, pues Cambronero está expulsado y Leonel Moreira se encuentra con la Selección Nacional.
“En realidad estoy muy orgulloso. Él es un joven muy centrado y muy educado, ha atravesado situaciones difíciles. He tratado de darle buenos consejos, pero yo lo que le he enseñado que tenga carácter”
Juan Carlos Alfaro vistió la camiseta del Herediano por más de 15 años, después militó en el Municipal Puntarenas, Carmelita, San Carlos y Pérez Zeledón.