18/12/11. Estadio Eladio Rosabal Cordero. Final entre Heredia y Alajuela. foto: eyleen vargas (Eyleen Vargas Davila)
En las gradas, los miles de seguidores de Herediano no salían del asombro al ver a su equipo derrotado, cuando esperaban que al fin conquistarían el título 22 para la escuadra florense.
En la gramilla artificial, mientras los manudos no cabían de alegría, los jugadores del
El más afectado, sin duda, fue el delantero Olman Vargas, quien minutos antes del final fue sustituido por lesión.
Como un niño, soltó el llanto y ni el consuelo oportuno del brasileño Jorge Barbosa pudo sacarlo de la desolación en que cayó.
La escena ocurrió cerca de los banquillos. A su lado, el volante uruguayo José Carlos Cancela se sentó en un asiento de los sustitutos y para que no vieran su lloro, prefirió taparse la cara con su camiseta y un trapo negro.
Muy cerca, el portero sustituto, Leonel Moreira, también daba muestras de dolor.
Pero no eran los únicos. Todos los jugadores del equipo Herediano estaban sumidos en la tristeza y estaban tan afectos, que prefirieron no hablar en el estadio.
No era necesario mayor discurso, la verdad, los ojos húmedos y la cara llena de furia denotaban todo lo que se podía decir en una situación tan delicada.
El único que habló en ese momento fue Pablo Salazar.
“No nos alcanzó haber dado lo mejor y por eso nos vamos tranquilos, aunque faltó lo que anhelábamos, que era el título 22 para nuestro equipo”, dijo el defensor.
Esto ocasionó que se desbordaran los ánimos cuando un aficionado erizo logró colarse en el sector de camerinos, pese a la estricta vigilancia de la seguridad privada.
El seguidor visitante fue agredido y como consecuencia de esa acción sufrió un fuerte golpe y cortaduras en la lengua.
Gracias a la intervención del técnico rojiamarillo, Jafet Soto, el manudo fue llevado lejos del jugar y era escoltado hacia la salida.
Pero en una acción inexplicable, la seguridad privada lo devolvió a los vestidores, donde de nuevo fue golpeado y su suerte es desconocida, pues a la prensa se le impidió ingresar a este sector del estadio.