Así como encara a los adversarios en la cancha, el volante del Saprissa, Daniel Colindres, hizo frente a las interrogantes de la prensa, luego que el cuadro morado cayó en casa 2-3 ante Alajuelense, en el clásico nacional, celebrado el sábado en el reducto tibaseño.
Colindres fue uno de los más señalados por su bajo rendimiento y sin tapujos aceptó que no está en su mejor nivel. Aseguró que no quiere poner excusas y explicó las situaciones que se han confabulado en su contra para no ser el jugador determinante que todos los morados conocen, luego de su regreso de Bangladés.
¿Cómo analiza Daniel Colindres el actual momento que vive en el Saprissa?
Soy muy autocrítico. Sé lo que puedo dar al equipo. Sé que en estas once fechas he estado en deuda, pero voy mejorando poco a poco.
¿Está muy lejos del nivel que venía mostrando en Bangladés, con su club Bashundhara Kings, o es que acá ese nivel es superior?
Vamos a ver... ¿Cómo le digo para no sonar a excusa? Después del último partido que hice en Bangladés, aproximadamente el 15 de marzo, venía con un ritmo aceptable, que se puede dar allá. Pero se vino esto (la pandemia de la covid-19) y pasé hasta el 27 de julio entrenándome en mi casa, sin tener contacto con la bola. No quiero sonar a modo excusa, pero el ritmo de juego es lo que da el nivel que uno quisiera. Lamentablemente cuando llegué acá entrenamos un mes y volvimos a encerrarnos. Yo hice como cuatro cuarentenas, pero no quiero excusarme. El profe (Wálter Centeno) me dio confianza, se lo he agradecido, pero no estoy al nivel que mostré en algún momento en el equipo y eso lo reconozco. Soy el principal autocrítico como lo reconocí antes. Sé que mi nivel no es el mejor, pero ahí voy mejorando poco a poco.
¿Es solo ritmo de competencia lo que le está afectando?
En el pasado he vivido esto. Recuerdo cuando Jeaustin (Campos) también estaba aquí y por ahí yo andaba en un altibajo, a veces jugaba y a veces no. Hoy no tengo excusas, el profe (Wálter Centeno) me ha dado confianza y sé que voy a retomar mi nivel a la hora buena, trabajo para eso. Sé que el trabajo respalda y a la hora buena saldrá a relucir mi trabajo.
Cómo referente y uno de los capitanes del Saprissa, ¿qué análisis hace del momento del club?
El partido ante Alajuelense lo manejamos. Hicimos varias posesiones largas, movimos la bola de lado a lado, por ahí pudimos encontrarnos un par de anotaciones y otro par de jugadas donde se pudo haber dado más, pero también Leo (Moreira) anduvo bien. En el segundo tiempo manejamos el partido. Con los cambios el equipo encontró la anotación, en los pies de Michael Barrantes. En un clásico o en un partido normal, cuando uno anota no puede dejar que le anoten en la jugada siguiente y nos pasó dos veces. Creo que allí fue el pecado.
¿Qué rescata del equipo?
En los partidos anteriores nos faltó contundencia, pero hoy (anoche) encontramos los goles, que por ahí no tuvimos en los partidos anteriores. Pero no podemos meter dos goles, ir dos veces arriba en el marcador y que en la jugada siguiente nos anoten.
¿Cómo analiza el trabajo del árbitro Juan Gabriel Calderón?
Conversando con el juez (Juan Gabriel Calderón) en la jugada entre (Adolfo) Machado y yo se da un majonazo de él hacia mí, que de acuerdo a su criterio no da para ser penal. No quiero señalarlo, pero entonces el penal que le hace Ricardo (Blanco) al chiquillo de Alajuela (Geancarlo Castro) no da para ser penal, es un forcejeo mano a mano. No quiero dar excusas, Alajuelense lo hizo muy bien, nos espero. Me parece que nosotros llevamos la mayoría del partido, manejamos la bola, la llevamos pie a pie, pero no supimos defendernos.
¿Puede estarle afectando al equipo los constantes cambios de alineación y sistema?
Nosotros trabajamos entre semana. Esto es de repetición, de repetición. El profe analiza el rival que tenemos de turno y siempre busca la formación adecuada para enfrentar al partido. Es cuestión de gustos, a él le gusta llevar balón pie a pie ahí y tenemos que adaptarnos el sistema.