Se nota un equipo en el primer tiempo y otro en la segunda parte, ¿qué pasó?
Primero no creo que haya sido así, lo que pasa es que en la segunda mitad tuvimos diez minutos donde estuvimos mal posicionados y después hicimos una variante en el mediocampo. Que yo sepa, los últimos 15 minutos estábamos encima del arco de ellos.
¿Fue una especie de pausa lo que impone en la etapa complementaria?
Claro que el equipo se llegó a cansar. Por ejemplo, yo a Fabrizio en el entretiempo le dije dame 15 minutos porque lo noté agotado y jugó todo el partido. Claro, es una pieza importante y queríamos ganar, que es otra cosa que hay que ver, nosotros no renunciamos.
“Estamos en una posición y en la forma que tenemos hay dos cosas que me ponen muy contento: primero que los jugadores están muy tristes y segundo que siempre pensamos en ganar. Eso para mí es importantísimo”.
¿Cuánto pesó ese gol tan tempranero del Saprissa?
Demasiado. Un error de coordinación entre la línea defensiva que nos deja en esa posibilidad de agarrarnos fríos, por suerte quedó ahí. Nos costó reaccionar porque el hecho de ese gol le dio a Saprissa ese aire para comenzar a dominar el segundo tiempo y a los 10 o 15 minutos comenzamos a reaccionar, fue muy poco el tiempo que tuvimos.
Se pierden dos puntos importantes en la lucha por la clasificación, ¿sienten que se pierde el chance de clasificar?
La matemática da y mientras eso esté vivo la ilusión es permanente. Nosotros lo que tenemos que hacer es trabajar día a día y partido a partido.
”Yo no puedo pensar lo que va a pasar dentro de cuatro fechas, la ilusión la guardamos a muerte.
“Cuando llegué acá les dije a los muchachos que vamos a tener que trabajar para sacar estas siete fechas y mínimo hay que que ganar al menos cinco de ellas”.
¿Es más difícil esta misión que cuando salvó al equipo generaleño del descenso?
Es más difícil este por la cantidad de partidos que hacen falta, la otra vez faltaban 12 jornadas, ahora son solo siete fechas, pero todavía estamos ahí.