Los técnicos Paulo César Wanchope y Óscar Ramírez se olvidaron de cuatro jugadores que asistieron al Mundial de Brasil 2014 con el colombiano Jorge Luis Pinto.
Los volantes Christian Bolaños, Michael Barrantes, Diego Calvo y el atacante Randall Brenes son los jugadores desterrados de la Tricolor .
Luego del Mundial celebrado en Brasil, la Federación Costarricense de Fútbol realizó nueve convocatorias, en las que se llamaron a 57 jugadores y estos nombres no se asoman.
Bolaños, Barrantes y Brenes mantuvieron el rodaje después de la cita mundialista.
El jugador saprissista registra 1.809 minutos jugados, divididos en 901 con el Cartaginés en el Invierno 2014 y 908 en el primer semestre de este año con el Al Gharafa de Catar, donde fue titular en 10 de los 11 partidos que jugó.
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Barrantes es el más regular con 3.735 minutos jugados entre el Aalesunds de Noruega y su actual equipo, el Shanghai Shenxin, en China, donde también está entre los estelares.
El Chiqui, luego del Mundial, jugó en Noruega con el Sanders como titular (892 minutos) y para este año regresó al Cartaginés, sumando en total 2.321 minutos jugados tras Brasil 2014.
El jugador de Alajuelense es el más inestable, aunque logró liberarse del Valerenga de Noruega y regresó al país en busca de regularidad, meta que no ha logrado cumplir. Tras la cita mundialista solo jugó 1.027 minutos.
Brenes, referente brumoso, apela a la autocrítica y acepta que hay jugadores con mejor nivel.
“Yo lo tomo con muchísima calma. Creo que el fútbol es de gustos y hay jugadores que están pasado un mejor momento que el mío, hay que ser autocrítico en eso. Los jugadores que han ido a la Selección es porque el técnico que ha estado ahí cree que lo merecen. (...) Lo de la Selección no es un capítulo que cierre, pero tampoco es algo que me preocupe”, afirmó Brenes.