Alajuela. La extraña actitud de Óscar Ramírez segundos después de recibir su cuarta medalla de campeón, cuando bajó de la tarima y se fue indiferente al camerino, tuvo explicación después.
Fue Mauricio Montero, su asistente, quien dejó ver que el Machillo no está a gusto en la Liga.
“Conozco muy bien a Óscar (Ramírez). Óscar no está contento, igual que mi persona; no está a gusto con ciertas cosas” , expresó Montero en la gramilla del estadio Morera Soto mientras los jugadores celebraban el título.
Chunche añadió que la situación de Ramírez tiene que ver con el poco valor que le da la prensa y cierta parte de la afición a su labor como entrenador, además de algunos aspectos institucionales.
“Son muchas cosas; desgraciadamente uno no puede hablar. Usted tiene que tratar de hablarlas dentro de la institución; que se quede en la institución y ojalá que no salgan. Son problemas que se pueden arreglar dentro”.
Cuando se le preguntó al asistente si fue por eso que el estratega ni siquiera volvió a ver a los medios de comunicación cuando intentaron entrevistarlo por su nuevo éxito, respondió: “Anda bravo. Él anda contento (internamente) celebrando por esto (el título), pero anda a disgusto, muy a disgusto”, recalcó sin tapujos.
“Parte de la prensa y gente no cree en lo que él hace; no reconoce que el equipo mete goles en combinaciones, de bola muerta... Le llaman defensivo, pero es preventivo. Se trata de recuperarla (pelota). El trabajo que se hace es buenísimo, pero la gente dice que es defensivo. Él se va desgastando; se agueva”, agregó.
Montero fue más allá al señalar que aunque Ramírez tenga contrato hasta mayo del próximo año, ello no lo detiene.
“Sí (le quedan seis meses con la Liga), pero a Óscar eso no le importa. Cuando toma la decisión, la toma”, manifestó Montero.
Extrañado. Al poner al tanto a Raúl Pinto, presidente de Alajuelense, de las palabras de Montero, este expresó: “De parte mía ha tenido (Ramírez) un apoyo total. Se le ha dado ayuda en todo, pero habría que hablar para ver qué siente”.