Como si no fuera suficiente estar en el último lugar de la tabla acumulada, ser dueño del sótano del Torneo de Clausura 2020 y figurar como el único equipo de la Primera División que no sabe lo que es ganar en todo el año; los atrasos salariales son parte del caos que vive Limón FC.
Jugadores y miembros del cuerpo técnico reconocieron que el problema con los pagos persiste y que es un tema de no acabar en un club donde los cambios de administración fueron la constante durante el 2019 y no logran una estabilidad para el plantel.
“Si en su trabajo llega la quincena o el fin de mes y no pagan, qué se puede pensar y qué se puede comer. Se necesita transportarse y alimentarse bien, pero hay una serie de cosas que están mal en Limón. Difícilmente podemos salir adelante si la parte administrativa no hace un cambio y no busca la mejora para el equipo en lo económico, para que los muchachos tengan un salario al día. Sería un milagro y con mucho trabajo que se puede resolver esto. La deuda con los jugadores sigue, algunos más y otros menos", dijo David Taylor Johnson, quien figura como estadígrafo y asistente de la Tromba.
La versión la ratificó Dexter Lewis, uno de los líderes de los caribeños y quien reveló que lo adeudado varía dependiendo del futbolista. Más allá de reconocer el esfuerzo de quienes están a cargo a nivel dirigencial, admite que no es fácil lidiar con el problema y enfocarse en lo que sucede en cancha.
“La administración está trabajando, las cosas van cambiando poco a poco, no como nos gustaría, pero lo están haciendo... El atraso es muy variado, porque hay diferentes periodos de jugadores y situaciones, así que es complejo puntualizar lo que se debe. Siempre es difícil cuando se junta todo. A los jugadores nos toca enfocarnos en lo futbolístico y ponerle el pecho a las balas, porque se está complicando todo y la ventaja es pequeña”, señaló Lewis.
La Tromba tiene un rendimiento paupérrimo del 4% en el Clausura 2020 y lo más preocupante para ellos es que luego de caer frente a Cartaginés (1 a 0 en el minuto 90+4) y de la victoria de La U Universitarios, pasaron al sótano de la acumulada con 26 unidades, una menos que los académicos.
La U sumó ocho puntos desde que Marvin Solano tomó el control y este desempeño les valió para reducir las distancias y poner a Limón en el lugar más candente. Eso sí, los caribeños apelan a que el Comité de Competición les otorgue el triunfo en la mesa del duelo correspondiente frente a Grecia (tiene suspendida la licencia) y con esto mantener algo de ventaja.
“No merecemos estar donde estamos, pero seguimos sin puntuar. Es preocupante, perdimos puntos valiosos en casa, pero no es nuevo venir de atrás... Tal vez no sea la persona indicada para hacer ver esto, pero cuando un equipo tiene cuatro cambios administrativos en un año es preocupante, porque ninguna ha podido dar con la ayuda que necesita el equipo. Nunca se va a salir adelante si no se tiene una guía y es complejo si se tiene un equipo de Primera División disque profesional, si no se tiene una buena administración”, agregó Taylor.