Análisis: Así despedazó Hernán Medford la idea de Wálter Centeno 

El Pelícano llegó al Ricardo Saprissa y puso de cabeza al club tibaseño. El estratega de cuna morada, hoy en Cartaginés, sorprendió a propios y extraños... ¿Cómo hizo el estratega para pasarle por encima a la 'S' y hacerlo inexistente su propia casa?

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Hernán Medford llegó al Ricardo Saprissa y puso de cabeza al club tibaseño. El estratega de cuna morada, hoy en Cartaginés, sorprendió a propios y extraños desde el banquillo para castigar a la 'S' de Wálter Centeno, con creatividad, agresividad y efectividad.

El equipo del Pelícano hizo un cotejo tácticamente excepcional; pero también un duelo mentalmente perfecto en el que despedazó a su contrincante sin piedad.

La Nación analizó junto a dos estrategas cómo fue que los brumosos desbarataron la idea de juego de Paté Centeno, ya que en la gramilla de la Cueva solamente se vio un equipo: el Cartaginés.

César Eduardo Méndez y Rándall Chacón profundizaron en las razones del porqué se vio un huracán blanquiazul arrastrar una, dos, tres y hasta cuatro veces a un cuerpo morado sin alma en el campo.

Los dos timoneles coincidieron en que Medford comenzó ganando el duelo desde la alineación, porque colocó dos puntas hábiles en el ‘uno contra uno’, que centralizaron el encuentro. La presencia de Andy Reyes, en vez de Allen Guevara, junto a Marcel Hernández fue un buen golpe.

“En lo primero que sorprende es en el sistema táctico porque Cartago hizo 5-3-2, le cubrió el ancho de la cancha a Saprissa y puso contra las cuerdas a los centrales porque los mantuvo ocupados siempre”, resaltó Chacón.

“Yo creo que donde Hernán sorprendió y Saprissa nunca corrigió fue con el juego de Marcel Hernández y Andy Reyes. El hecho que los dos jugaran sobre los dos centrales creó demasiados problemas y no hubo solución. Ahi liquidó Cartago, con los dos delanteros fijos, porque a Espíndola lo dejó en evidencia de que no está adaptado y eso hizo que Aubrey se desordenara demasiado”, agregó Méndez.

El planteamiento burmoso en fase defensiva provocaba que siempre tuviera al menos cinco zagueros para luchar contra las embestidas contrarias.

Para Rándall Chacón otro punto trascendental fue cómo Medford anuló las individualidades de Jimmy Marín y Daniel Colindres por las bandas.

“Cuando Saprissa intentó ir a las anchas no se veía bien, si Colindres pasaba tenía al central encima. Igual le pasaba a Marín. Los tres volantes centrales de Cartago mantuvieron la zona y ganaron posición, fueron férreos, estuvieron juntos en la línea de cinco. Así Saprissa nunca encontró el espacio entre líneas que tanto aprovecha Johan Venegas”, explicó.

Méndez reveló que un punto no tan táctico pero sí influyente fue la forma de comportarse de ambos planteles.

El exentrenador de Herediano dijo que vio un Cartaginés agresivo, fuerte y mentalmente destacado desde el primer minuto de juego hasta el 90′; por su parte, en el Saprissa notó un cuadro pasivo y disminuido.

“Es que mirá si fue extraño que yo diría que los jugadores de Saprissa que jugaron el miércoles no eran los de verdad. Es que Cartago fue como un tren bala y Saprissa parecía una bicicleta. ¿En que ganó el equipo de Medford? En todo, porque los ‘mano a mano’ todos los controlaban, pero en reacción fue muy marcada la diferencia”, acotó.

“Más allá de que Hernán se fue temprano, por expulsión, él dejó plasmado en la cancha lo que transmitió. Saprissa se vio demasiado disminuido mentalmente. Eso llama la atención, porque es el campeón. Se vio muy sobrepasado Saprissa. Es que mirá que cuando a Hernán lo expulsan se ve frustrado, en cambio en el banquillo de Saprissa se veía una pasividad aunque iban perdiendo... Fue muy extraño”, agregó.

Chacón enfatizó en que la efectividad brumosa también es de alabar, porque eso generó un impacto mental en el Monstruo del que nunca se levantó. En cinco minutos ir perdiendo 2 a 0 es impactante.

La opinión fue secundada por César Eduardo, quien ejemplificó con el segundo gol brumoso lo sucedido en el cotejo.

“Volviendo al segundo gol, todos terminamos de pensar en el error de Aarón, pero nos pasa por alto que fue una pelota que perdió Saprissa en su campo y ojo: la perdió, no fue que se la quitaron por presión, sino por error técnico. Marcel no presionó, Cartago estaba esperando y recibió la pelota. Saprissa entró como frío, distraído, no quisiera decir confiado, pero entró en un estado no natural de Saprissa”, añadió.

Este primer resultado desde el punto de vista de Chacón y Méndez condiciona el partido del próximo domingo en el Fello Meza, porque los cuidados de una sorpresa serán mayores tanto de Centeno como de Medford.

El encuentro que se viene no se visualiza de muchas anotaciones según los entendidos y lejos de mostrar a un Cartaginés agresivo como el que salió el miércoles se puede esperar un equipo replegado aprovechando la presión anímica que tiene la S por lavarse la cara.

“Imagino un Cartago con un 5-4-1, bien ordenado y buscando el contragolpe, porque Saprissa saldrá con ese aire de revancha a llevarse lo que tenga al frente”, concluyó Rándall Chacón.

César Eduardo Méndez finalizó su evaluación poniendo a Cartaginés por encima de nuevo, sobre todo por el golpe anímico que dio.

“Yo pensaría que del lado de Saprissa estarán preocupados, no pueden hacer otro juego igual porque prácticamente pasó por lo futbolístico, pero también por un estado individual de que no sintieron el partido. Uno que es entrenador sabe palpar y creo que Cartago puede repetir, se vio muy golpeado a Saprissa”, sentenció.