Alex López nunca había vivido una definición por penales desde la banca

Luis Diego Arnáez lo sacó antes porque sintió que ya estaba desgastado, mientras que cambió a Luis Garrido y a Jonathan McDonald para cuidarlos, pues ya estaban amonestados

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Una noche antes del juego de vuelta de la semifinal entre Liga Deportiva Alajuelense y San Carlos, Luis Diego Arnáez dijo que su equipo estaba bien físicamente, en caso de que la serie se extendiera a tiempos extra.

Tenía contemplada la posibilidad de la ruleta rusa, pero jamás creyó que así sería como los manudos avanzarían a la fase final del torneo.

Alex López anotó un tiro libre en el minuto 55′ y en el banquillo erizo pensaron que debían amarrar la serie, al tiempo de que también tenían que cuidar hombres ya amonestados.

Kenner Gutiérrez entró por Luis Garrido en el 67′. Era la reaparición del zaguero tras la lesión, quien llevaba la misión de acompañar a Porfirio López y a Allan Miranda atrás; mientras que José Miguel Cubero pasaba de la defensa a la contención.

Jonathan McDonald le cedió su lugar a Daniel Villegas en el 77′ y Luis Sequeira ingresó al 80′ como relevo de Alex López.

“En los cambios Garrido ya se había sacado una amarilla y estaba corriendo riesgos, entonces decidimos no correr riesgos y relevarlo. Alex López estaba muy desgastado y en el caso de McDonald estaba corriendo riesgos con el árbitro”, explicó Arnáez.

Daba la impresión de que el tipo de cambios que hacía el Flaco eran orientados a cuidar el marcador. El problema de los manudos estuvo en el 84′, cuando Allan Miranda derribó a Álvaro Saborío en el área. Con acierto, el silbatero pitó la pena máxima y el goleador norteño colocó el 1-1.

La serie se fue al alargue y fue en ese lapso cuando Alajuelense jugó mejor que San Carlos. Para los penales, venía otro dilema, pues tanto Mac como Alex López, que estaban entre la lista de los lanzadores, se encontraban en el banquillo.

“Nervioso, la verdad que nunca me había pasado estar así, estaba hablando con McDonald y con Garrido porque a mí era uno de los que me tocaba con Mac y al final, a uno le queda esa espinita de poder tirar un penal”, comentó el volante catracho.

Mientras que Jonathan McDonald apuntó: “Fue duro, porque yo creo que en las últimas finales que ganamos por penales nunca me ha tocado y tener esta así también es duro estar ahí, sentir esa impotencia de que sos uno de los cobradores de penales y que no, aparte de que sentía que podía tener mi revancha por fallar ese penal ahí que es totalmente error mío a la hora de tirar”.

Ambos dicen que siempre confiaron en los lanzadores, así como en un Patrick Pemberton que les inspira confianza. De hecho, ellos acataron la decisión del Flaco y no salieron molestos cuando él optó por suplirlos.

“Fue un cambio táctico, todos desde que iniciamos somos anuentes a salir de cambio, no pasa nada, un cambio más, en un partido importante”, indicó Mac.

Inclusive, el mismo López reseñó que las permutas fueron “pensando en una función”.

Para el arquitecto del juego liguista, ese tanto que le marcó a San Carlos en el tiempo regular le da confianza para la fase final, tomando en cuenta que también anotó con su selección contra Chile.

“Es el segundo gol que meto en el torneo, pero para mí meter un gol o dar una asistencia es lo mismo, porque siento que al final puedo colaborar con el equipo. Ahora lo que toca es hacer un gran partido contra Herediano. Desde que puse la pelota créame que así a como se dio, así lo imaginé cuando la bola entra”, acotó el hondureño.

Alajuelense visitará a Herediano el domingo a las 6 p. m., en el juego de ida de la fase final que se disputará en el Rosabal Cordero.