La persecución continua. Saprissa le arrebata el liderato a la Liga. El León responde y retoma la cima. La carrera por el primer lugar se convirtió en una lucha cuerpo a cuerpo, en la que el más mínimo despiste se transforma en un duro golpe.
La esencia de este torneo la marca el arrebato de orgullo de los dos clubes más populares del país, aferrados a la idea de conquistar el puesto de privilegio y con ello garantizar un lugar en la gran final del campeonato.
Hoy fue la Liga el que se sacudió, después del tropiezo frente al Team que le permitió a la S acaparar la punta del torneo.
Con una paliza de 5 por 1 frente al colero la UCR, Alajuelense mantiene la convicción de pelear hasta el último segundo.
El triunfo confirma un cierre que se definirá con photofinish.
Saprissa se mide este jueves con Grecia; de ganar, recupera el primer lugar y deja todo para la última fecha, en donde podría jugar hasta el número de goles anotados por cada escuadra.
En el enfrentamiento de este miércoles, la Liga se “desquitó” con la ‘U’ de Mínor Díaz, un equipo incapaz de sostener la ventaja en el marcador, después de ponerse arriba con un contragolpe magistral culminado por Francisco Rodríguez al minuto 24’. Gol de buena factura.
La Liga es un equipo con dos caras. Cuando por necesidad apuesta a generar y llevar la iniciativa, profundiza por los costados y recarga el juego de creación en los pies de Alex López.
Para el fútbol de elaboración tiene recursos suficientes en el eje medular, pero le cuesta llevar el peso y luego repeler las salidas rápidas del contrario, a causa de la lentitud de su zaga.
También evidencia una clara ansiedad que, en ocasiones, se convierte en constantes jugadas de gol desaprovechadas.
Es con el marcador a favor y a la contra que se vuelve temible, a razón de la velocidad en las transiciones y la claridad de sus atacantes para ejecutar, casi de memoria, el juego ‘de tome’ y dame’ en el último cuarto.
Róger Rojas, de velocidad en espacio corto, se convierte en un arma clave dentro del objetivo manudo de pisar el área rival lo más rápido posible, antes de que el contrario se repliegue.
Después de mucha insistencia, Jonathan Moya anotó el empate al 35’, luego de un remate de Rojas que el arquero Alpízar apenas pudo desviar; para aprovechar el rechazo estaba el delantero, algo ansioso en los últimos juegos, pero capaz de abrir la cuenta para los rojinegros.
El rostro de la Universidad se deformó con el primer tanto y muy rápido apareció nuevamente Rojas, esta vez para aprovechar un centro de Meneses y perforar las redes al minuto 42’.
El propio Meneses se encargó de liquidar el duelo con un gol de buena factura al 48’. El carrilero izquierdo remató de primera intención y venció a Luis Alpízar.
El segundo periodo fue un monólogo rojinegro, que apeló a la necesidad de marcar el mayor número de tantos posibles en busca de recortar distancias con la S en el gol diferencia.
Jonathan McDonald anotó el cuarto tanto al 66’, después de aprovechar una combinación entre López y Rojas. Y al 89’ llegó el turno de Daniel Villegas.
Es evidente que en el librillo rojinegro hay un hombre vital para manejar los hilos y decidir cuando se debe atacar o, por el contrario, bajar el ritmo.
Alex López es el ‘capitán’ del barco manudo y la ‘U’ nunca pudo descifrar su juego. Sí lo hizo Herediano el pasado domingo.
El talentoso volante hondureño es como una arteria del corazón que comunica al eje medular con los hombres del ataque. Sin él, la Liga no oxigena.