Se imagina estar estacionado a la orilla de una carretera y de pronto ver que de un autobús bajan Mariano Torres, Christian Bolaños y Ariel Rodríguez. Esto le sucedió a Patrick González, un joven aficionado de Saprissa, quien compartía con sus amigos y de repente en media calle tenía a las tres figuras de su equipo.
Patrick ni lo pensó para ir a tomarse fotos con ellos y al final, hasta ‘ride’ le dio a Christian Bolaños.
Patrick terminó tan emocionado, que comentó medio en broma (¿o era en serio?) que subir a Christian en el carro hizo que el vehículo quedara bendito.
Esto sucedió el sábado pasado, justo después del clásico, y éste joven de 23 años e ingeniero industrial, tuvo su noche redonda, porque celebró el triunfo de Saprissa ante la Liga y la cereza en el pastel, fue viajar con Christian Bolaños durante 20 minutos, en un recorrido en el que él y sus amigos le preguntaron de todo.
“Estaba con mi novia, quien vive en San Antonio de Belén, y unos amigos viendo el clásico. Cuando terminó el juego, salimos de donde nos encontrábamos y nos estacionamos en la calle aledaña a la Autopista General Cañas, por donde está el Hotel Doubletree en Cariari y vimos que llegó un bus y nos percatamos que era el de Saprissa, en eso bajaron Mariano Torres, Ariel Rodríguez y “Bola” (Christian Bolaños). Ellos cruzaron por donde está el puente peatonal y quedaron cerca de nosotros, mi hermano dijo: ‘Bajemos del carro y nos hacemos unas fotos con ellos’”, contó Patrick, quien estaba en el vehículo con su novia Ivannia Solano, su hermano Anthony González, su amigo Adrián Hernández y Ariana Ramírez, la novia de Adrián.
“Le preguntamos a Mariano si nos hacíamos unas fotos y todo bien con él. En eso llegaron a recoger a Mariano y se fue. Quedaron Ariel y Bolaños. Al momento llegaron por Ariel y le dijimos a “Bola”, pero cómo, “Bola”, se queda solo. Y nos contestó que dejó el carro en el Hotel Radisson (donde Saprissa se concentró previo al clásico). Le dije vamos para San José, si quiere lo llevamos y dijo: ¿De verdad?. Claro sí gusta, le contesté. Y dijo sí y nosotros emocionadísimos de viajar con él”, recordó Patrick de ese momento único para él y sus amigos, que luego se convirtió en un trayecto especial.
“De una vez le cedimos el primer asiento adelante, le pusimos música y todo. Somos morados y estábamos demasiado contentos de que Saprissa había ganado en Alajuela, fue un viaje increíble, le preguntamos qué se sentía jugar la Champions, que se sentía ser amigo de Keylor Navas, si al estar con Keylor, él le habla sobre Messi y Neymar y cómo son ellos. Y por supuesto le preguntamos qué se siente ganar un clásico en el Alejandro Morera Soto y dejar a todo el mundo en silencio”.
Pese a la lluvia de preguntas, el joven destacó que Bolaños siempre sonriente y amable respondió a cada inquietud en ese viaje desde el Cariari hasta Barrio Tournón en San José.
“El decía, ganar un clásico ahí es lo mejor, es demasiado rico. Nos comentó que Keylor le decía que Neymar y Messi son muy buena nota, muy tranquilos y le dije: “Bola” se lo ruego, jamás en la vida se vaya para la Liga, no nos haga eso y decía: ¡Ah no, no mae, tranquilo!”.
Patrick nunca había tratado a Mariano, Ariel y a Christian, menos se imaginó que tendría la oportunidad de conversar 20 minutos con Bolaños.
“Fue una experiencia única. Yo le conté a mis papás y les dije: Eso es increíble, cuándo en la vida me iba a imaginar que después de ganar un clásico en Alajuela íbamos a montar a Bolaños en el carro y llevarlo”.
“Nos tomamos bastantes fotos, incluso llegando al hotel, nos hicimos otras. Después en el carro le decíamos a mi novia, quien es dueña del carro, que por favor no lavara el vehículo, porque ese carro quedó bendito”.
Patrick y sus amigos trataron de que Christian estuviera lo más cómodo posible y hasta perfume le ofrecieron.
“Íbamos muy emocionados con ese viaje con “Bola”, mi hermano le dijo quiere colonia, quiere chicles, pero ya él traía puesta su propia colonia. Después de dejarlo en el hotel, mi novia decía: ‘Se lo juro, nunca en la vida he olido en una colonia tan rica como la que Bolaños llevaba puesta’. Olía súper rico. Ella casi le pregunta cuál era la marca, pero le dio pena”.
Patrick comentó feliz de la vida que vivió uno de los mejores sábados que ha tenido en su vida.