El juego sirvió de paso para presentar la planilla morada que hará frente al Torneo de Invierno 2011.
Cuando hablamos de despedidas pensamos en momentos emotivos. Anoche en la
El “3” morado ingresó al terreno de juego al minuto 21 al sustituir al zaguero Gabriel Badilla, y fue entonces que el público presente ofreció un concierto de aplausos y cánticos en su honor.
En el entretiempo se vino el homenaje para Cordero.
Rodeado de niños y sus compañeros de equipo, el capitán caminó junto a sus hijos hasta el centro del campo y de inmediato procedió a dar la “vuelta olímpica” para despedirse de los seguidores morados.
Ambos equipos recién terminan de afinar sus esquemas tras sus respectivas pretemporadas.
El técnico Guimaraes plantó en el terreno de juego un equipo sólido en media cancha y buscando velocidad por las bandas con Heiner Mora y Kraesher Mooke.
Un disparo de Scott al 17' fue el culpable de que la afición se olvidara de una fría noche y de paso exigió al arquero Cristopher Toselli.
El volante Manfred Russell destacó en la creación saprissista. Más maduro y con mucha sobriedad regresó el mediocampista tras su ausencia de dos años al militar en San Carlos en condición de préstamo.
Las emociones se quedaron para el la etapa complementaria.
La gran cantidad de cambios por parte del timonel de Saprissa le dieron mayor movilidad, acrecentando el ritmo y por ende creando ocasiones de gol que Toselli se encargaba de resolver muy bien.
Cuando parecía que la fría noche terminaría con un empate sin goles, apareció una gran asistencia de Walter Centeno, quien aprovechó la velocidad de Matínez y lo puso a correr.
El ariete morado arrancó y gracias a su rapidez llegó para encarar al arquero Toselli, al que venció con remate cruzado al palo derecho.
Pero no todo terminaría ahí. El mismo Martínez martilló de cabeza un centro de Alonso Solís y el 2-0 definitivo al 90'+2', en un juego por momento rápido y por otros estancado, pero que dejó ver un problema que padece Saprissa desde el torneo anterior: la definición.