A inicios de diciembre pasado, un extraño de pelo largo vino a Costa Rica por el interés marcado de la Fedefútbol de ponerlo en la silla que dejó vacante el colombiano Jorge Luis Pinto.
Aquel hombre, llamado Ricardo Gareca, se paseó por el Proyecto Gol y sostuvo reuniones con federativos pues era el candidato de consenso para darle las riendas de la Mayor.
Su corta estadía (se quedó tres días en suelo tico) ocupó el interés total pues en aquel momento había un “95% de posibilidades de que sea nuestro entrenador”, según palabras de Rafael Vargas, secretario de la Fedefútbol.
Antes de abandonar territorio nacional el mismo Gareca afirmó que “Costa Rica es la prioridad en mis planes”.
Sin embargo, diez días después de su visita, el Tigre declinó la oferta al aducir asuntos personales y la imposibilidad de firmar un contrato por cuatro años.
Ilusiona a Perú. El mismo entrenador que le dijo no a Costa Rica asumió Perú, en marzo anterior, y hoy destaca en el certamen del sur del continente.
El argentino tiene a la selección peruana en cuartos de final, donde se medirá a Bolivia, el jueves a las 5:30 p. m. (hora tica), detalle que le valió además para ser nombrado como el mejor entrenador de la primera fase, según el Comité Organizador de la Copa.
“Gareca es un técnico joven y seguramente con Costa Rica hubiera obtenido logros. En Perú su trabajo ilusiona al país pues en la Copa América ha destacado a pesar de que llegó con solo dos partidos de preparación”, indicó a La Nación Michel Dancourt, del diario peruano La República.
De acuerdo con Dancourt “lo de Gareca es sobresaliente, hay ilusión, expectativa y lo que más gusta es que es un técnico serio, no como el que estaba antes (Pablo Bengoechea), que cada vez que hablaba daba titulares y era capaz de pelearse con un hincha en el aeropuerto”.
Carlos Salinas, director del deportivo Líbero , explicó que sin caer en triunfalismos, Gareca le cambió el semblante al cuadro inca. “Hace tiempo no se veía que una selección peruana juegue con temperamento, ha trabajado mucho la autoestima del jugador y ha hecho que este crea en un objetivo. De ahí parte el éxito de Ricardo Gareca”, subrayó.