Cristiano Ronaldo planteó la meta tan alto como es posible: ganar los seis títulos oficiales que disputarán en la venidera temporada.
Es lo mínimo. Este Real Madrid se armó para marcar una era en el fútbol mundial. Dejar huella en la ya maravillosa historia merengue.
Es mirar al cielo y perseguir el estatus de leyendas, como hicieron aquel equipo de Alfredo di Stéfano y Ferenc Puskás conquistando las primeras cinco coronas de Europa, la Quinta del Buitre con el pentacampeonato en España, o los maravillosos Galácticos que atrajeron todas miradas de todo el orbe.
Una historia tan laureada y brillante que no permite limites a la ambición: hay que ganarlo todo.
Para Ronaldo es la necesidad de superar a Lionel Messi. El luso ya recuperó el Balón de Oro y ahora su misión es devastar la marca dejada por el equipo de Pep Guardiola.
Ganar la décima Liga de Campeones de Europa es solo el primer paso. Ahora hay que emular, ya que no se puede superar, lo que hizo el Barcelona en el 2009 al conquistar el único “sextete” de la historia.
En lo más inmediato, esta nueva movida madridista irá a por todo: Supercopa de Europa, Supercopa de España, Mundial de Clubes, La Liga, Copa del Rey y la –undécima– Champions League .
¿Imposible? Para borrar cualquier límite llegaron James Rodríguez, Tony Kroos y Keylor Navas a unirse a la indetenible BBC: CR7, Karim Benzema y Gareth Bale.
Si se apuntala un campeón es para perseguir la perfección, entendida como perfección blanca.
La política Bernabéu. Con el presidente Florentino Pérez el Real Madrid ha sido un club apoteósico en toda la extensión de la palabra.
Su política de fichajes es clara: siempre traer a los mejores futbolistas, sin que nada o nadie pueda interponer en su camino.
Mantiene así, dice Pérez, los ideales de Santiago Bernabéu, patriarca de la tradición merengue.
Una historia que se hizo grande con la llegada de Di Stéfano, catalogado como la contratación más prolífica de todos los tiempos. Una afirmación sostenida por la conquista de los primeros cinco campeonatos de de Europa que se disputaron. La vara quedó demasiado alta, en total fueron 19 coronas.
La Quinta del Buitre marcó otra época dorada. Liderado por Emilio Butragueño, el Madrid repitió la hazaña del pentacampeonato en España y ganó dos Copas UEFA.
En la primera etapa de Florentino, el Real rompió todos los récords parar juntar en una misma cancha a fenómenos del fútbol como Luis Figo, Zinedine Zidane y Ronaldo, quienes se unieron a Raúl, Roberto Carlos y otros grandes jugadores.
Los Galácticos fueron más llamativos que efectivos. Si bien expandieron la marca mundial del Real Madrid, solo ganaron una Champions y un par de ligas.
La exigencia para el equipo del comandante Ronaldo es máxima. Será el tiempo y los goles los que determinen su lugar en la historia.