Abu Dabi (AFP). Los jugadores argentinos del Inter de Milán, Javier Zanetti y Esteban Cambiasso, mostraron hoy su respeto por el Tout Puissant Mazembe congoleño, rival de su equipo en la final del sábado en el Mundial de Clubes, intentando escapar de cualquier exceso de confianza.
Ambos comparecieron en la rueda de prensa de la víspera del partido, antes del entrenamiento en el estadio Zayed Sports City de Abu Dabi, y coincidieron en destacar la importancia de esta competición y la necesidad de afrontar con el “respeto” debido el duelo contra el Mazembe, la revelación del torneo.
“En una final no hay favoritos. El futbol actual está equilibrado, así que partimos igualados. Sería un error por nuestra parte sentirnos favoritos”, estimó Zanetti, en presencia de su compatriota Cambiasso y el técnico del equipo, el español Rafa Benítez.
“Estamos ante una gran oportunidad de alcanzar el techo del mundo. Es difícil, las finales no son fáciles, pero esperamos poder ganar el partido y llevarnos este torneo tan importante”, apuntó.
Zanetti fue uno de los goleadores del equipo en el partido de semifinales ante el Seongnam Ilhwa surcoreano (3-0), consiguiendo el segundo tanto a la media hora de juego, tras una gran combinación con su compatriota Diego Milito.
“La otra noche (miércoles) fue difícil. Tuvimos suerte de hacer un gol muy pronto y luego pudimos controlar bien. Pero fue un partido de esos en los que si no estabas atento te podían poner en muchas dificultades”, dijo.
Cambiasso destacó por su parte que el Mazembe se había ganado que le tuvieran el “máximo respeto” por su buena andadura en el torneo, donde dio la gran sorpresa eliminado al único sudamericano en liza, el Inter de Porto Alegre brasileño, dejando a la zona Conmebol por primera vez fuera de la final.
En el primer partido en Abu Dabi, el Mazembe había firmado otra sorpresa, superando 1-0 al Pachuca mexicano.
“Es la primera vez que llega este continente (África) a la final, la primera vez que hay un equipo que no es de Europa o Sudamérica. Tiene mérito por haber eliminado al representante sudamericano, así que vamos a tenerle el máximo respeto”, afirmó Cambiasso.
El jugador tuvo la oportunidad de disputar y ganar en el pasado la Copa Intercontinental, cuando vestía los colores del Real Madrid, y recordó la felicidad que le supuso aquel éxito, cuando el equipo de la capital española superó en Yokohama (Japón) al Olimpia paraguayo (2-0).
“Tuve la fortuna de ganar este título en su anterior formato (duelo directo Europa-Sudamérica). Pero no por eso mi deseo de ganar es mayor. Es un torneo diferente, especial, que pude ganar en el pasado y que quiero tener la fortuna de poder ganarlo de nuevo”, aseveró.
El partido entre Inter de Milán y Tout Puissant Mazembe comenzará el sábado a las 11 a. m. (hora tica), en el estadio Zayed Sports City de Abu Dabi, que se despide así del Mundial de Clubes, tras dos años como sede. En 2011 y 2012, el torneo regresa a Japón.