En los próximos días, en Nairobi, se llevará a cabo la Ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC), como continuación de la Ronda de Doha para el Desarrollo que tuvo avances en Bali hace dos años.
El papel de la OMC es fundamental porque es el foro en donde se sientan en la mesa tanto países desarrollados como economías emergentes y países menos desarrollados, todos con distintos intereses, en busca acuerdos sobre las reglas del intercambio comercial, pero bajo un panorama muy distinto hoy al de la creación de la Organización.
Por ejemplo, las distinciones de países en desarrollo y desarrollados están desactualizadas con respecto a potencias como la India y China. Adicionalmente, se discute cómo puede la OMC abordar temas de actualidad, entre estos la integración a las cadenas globales de valor, el derecho de inversiones y el cambio climático.
Entonces, ¿cuáles asuntos están en discusión? Uno es el seguimiento relacionado con el Acuerdo de Facilitación del Comercio, negociado en Bali.
El acuerdo busca la agilización en los procedimientos de movimiento de mercancías, cooperación en aduanas y transparencia. Costa Rica fue uno de los países firmantes y se esperaría que tenga un papel pionero en su ejecución.
Otro punto relevante para el país es el borrador del Acuerdo sobre Tecnología de la Información (TIA). Este grupo trabaja para lograr la liberalización arancelaria de los productos de tecnología de la información, por lo cual un convenio en este ámbito representaría un apoyo sustancial a la educación, a las empresas y a los emprendedores que utilizan la tecnología como insumo, pero también a los que ven potencial para exportar sus bienes tecnológicos.
En el caso de Costa Rica, las exportaciones de este tipo de productos, algunos de los cuales estarían libres de aranceles con el TIA, ascendieron a $2.000 millones en el 2014.
En Nairobi se continuará la discusión de un programa dirigido a las economías pequeñas establecido desde el 2002 para apoyarlos en su integración al sistema multilateral. No obstante, aún no se ha alcanzado un consenso con respecto a agricultura, servicios, subsidios y facilitación del comercio planteados en la Ronda de Doha.
En este campo se presentó una iniciativa de exención para los países menos adelantados para que sus proveedores de servicios tengan tratamiento preferencial y normas de origen preferenciales, que sería importante para eliminar inequidades en el intercambio mundial.
Asimismo, se habla de la posibilidad de eliminar los subsidios a la exportación, lo cual sería un avance sin precedentes en la OMC.
En materia agrícola se permite que los Estados puedan otorgar subsidios aun cuando sean exportados (con compromisos de reducción). Esta es una distorsión porque llevaría a comprometer la producción agrícola en otros países que reciben esas exportaciones subsidiadas.
El texto propuesto especificaría las fechas en las que los países eliminarían los subsidios a la exportación.
Con respecto al aspecto de ayuda alimentaria, se habla de establecer reglas claras para otorgarla. Esta también es una materia en la cual urge regulación para evitar que las ayudas a países menos desarrollados se suspendan cuando haya aumentos en los precios mundiales.
Por último, la reunión pone en el foco de atención al continente africano, particularmente a Kenia, país con un potencial interesante para negocios y con un crecimiento del 2,6% anual.
Es la oportunidad africana para brillar en el comercio y la oportunidad de la OMC para continuar revitalizándose al cumplir 20 años de existencia.
En este contexto, será vital mantener el papel que desempeña Costa Rica en el apoyo a las iniciativas que buscan consensos, insistiendo en acuerdos de relevancia para el país, como el TIA, y en los temas de actualidad en el comercio mundial.
La autora es profesora de Aduanas y Comercio en la UCR e investigadora WTI en Suiza.