Foro: Comparación de Ponderosa con caso Escobar es imprudente

Los animales ingresaron al país con el aval de Senasa y se presentaron los certificados veterinarios.

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La lectura del artículo titulado “Minae desea evitar propagación de animales exóticas como pasó con hipopótamos de Escobar en Colombia”, publicado el domingo 27 de setiembre, me causó una gran tristeza.

En él la ministra de Ambiente, Andrea Meza, y el viceministro, Franklin Paniagua, compararon de la peor manera a Costa Rica con Colombia, en relación con la reproducción de los hipopótamos.

Pablo Escobar era dueño de uno de los capitales más grandes del mundo en aquella época y, por si fuera poco, no existía ley para él en Colombia, por lo cual nunca tuvo que contar con planes de manejo, como exigen en nuestro país; pero ese no es el problema.

Reglamento inconstitucional. En Costa Rica se da algo peor: un reglamento lleno de inconstitucionalidades incurre en faltas al bienestar animal y deja a miles de personas sin trabajo en plena crisis.

En el artículo se señalaron los peligros de las enfermedades zoonóticas; sin embargo, yo cuestiono cuáles enfermedades y de qué animales, porque en toda la información recopilada no encuentro ningún caso con respecto a Ponderosa Adventure Park.

Lo que sí hallo con todo respaldo es que cuando las especies ingresaron a Costa Rica contaron con el aval del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa), además de certificados veterinarios.

Recuerdo perfectamente las declaraciones dadas el 8 de marzo del 2007 a este diario por Ronald Vargas, quien fungía como director del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) y que señaló que, en aquel momento, África Mía, hoy Ponderosa Adventure Park, cumplía las normativas para la importación de animales y la ley de vida silvestre, y lanzó una invitación a visitar las instalaciones.

Otras investigaciones. A ambos jerarcas los invito a investigar sobre la extinción de insectos debido al uso indiscriminado de herbicidas y plaguicidas, y el contagio de hongos en anfibios a causa de la intromisión del hombre en parques nacionales —grandes fuentes de ingreso económico para el país—, por ejemplo, en la rana dorada de Monteverde.

Con respecto a enfemedades zoonóticas, les planteo otro asunto que me preocupa muchísimo: la liberación de aves en un zoológico que pasó a llamarse centro de rescate, bastante curioso por cierto.

¿Existe personal dedicado al cuidado y evaluación de las aves antes de las liberaciones? Además, ¿han sido monitoreadas las liberaciones hechas en algunas de sus fincas y cuáles métodos científicos se usaron para liberarlas?

¿Se han efectuado pruebas para detectar enfermedades como beak and feather, psitacocis, Pacheco, parásitos internos y externos, entre estos ácaros, de los cuales hay infinidad, pero uno muy común es Sternostoma tracheacolum, visto en canarios y de fácil transmisión al resto de las aves?

Les recuerdo a ambos que si en ese u otro centro coexisten canarios con aves nacionales en jaulas cercanas se corre el riesgo de contagio y de que se liberen especies infectadas.

¿Cuántas variedades en el mundo, gracias al cuidado y trabajo responsable para reproducción de especies exóticas en zoológicos y centros de rescate, han regresado a la naturaleza después de que se creían extintas? Menciono algunas: hurón pies negros, grullas, cocodrilo siamés, órice de Arabia, rana dorada de Panamá.

Desde mi punto de vista lo que se requiere es sentar a las partes involucradas y que cada una aporte conocimientos para evitar tanto abuso producido por un reglamento viciado, que nunca ha respondido al bienestar animal y a los intereses comunes, y beneficia a unos pocos.

El autor es experto en vida silvestre.