EscucharCon respecto a la publicación del 11 de diciembre del presente año en LaNación, cuyo título es “Estamos produciendo delincuentes”,quiero comentar lo siguiente: en Alajuelita lo que está pasando es que estamos sufriendo un total abandono por parte de las entidades del Gobierno. Se nos da la espalda y no se atienden las necesidades que este cantón requiere.
Ante la falta de oportunidades para jóvenes que no trabajan ni estudian, está aumentando la delincuencia, como en otras partes de Costa Rica. No es que estemos “produciendo delincuencia”, como se nos puso en la nota amarillista publicada en este medio.
Este cantón en los años 70 y 80 fue tomado por el Gobierno, y pasó de 20.000 habitantes a casi 136.000.
Lo malo es que ese crecimiento desmedido de la población no fue controlado ni planificado. Un crecimiento sin infraestructura provocó que muchas de estas personas pasaran a vivir en situaciones deplorables.
Sin embargo, durante muchos años, este cantón ha venido creciendo lentamente y con proyectos que los mismos vecinos, asociaciones de desarrollo, el Concejo Municipal, las fuerzas vivas del cantón y la Alcaldía Municipal han ido trabajando con las uñas, porque no se ha contado con el apoyo del Gobierno, y esto es lo que más nos afecta.
La deserción estudiantil, la falta de oportunidades laborales, es lo que ha venido a provocar un gran problema en este cantón y por ello la delincuencia se ha apoderado de Alajuelita; pero no solo aquí, es un problema que se vive en todos los cantones de Costa Rica.
Sin embargo, los medios de comunicación se ciñen en “echarnos más tierra”, sacando solo lo malo que pasa en el cantón y no participando del montón de proyectos que se han venido trabajando y principalmente del esfuerzo que la Alcaldía y el Concejo Municipal han realizado para sacar adelante Alajuelita.
Estar en el último lugar del Índice de Desarrollo Humano es un puesto que no nos merecemos porque, si bien es cierto que nuestros niños, niñas y jóvenes desertan de las aulas, se trata en realidad de una problemática que se da a nivel nacional, pero se ve recargado en este cantón por la sobrepoblación y los problemas económicos que las familias tienen, por la falta de oportunidades.
Como cantón hemos venido luchando para poder mejorar infraestructuras en los centros educativos, pero no hemos contado con el apoyo del Ministerio de Educación.
Hemos venido buscando mejorar las instalaciones de la Caja, pero tampoco contamos con el apoyo que necesitamos, y así innumerables situaciones que no nos ayudan, pero que, por el contrario, sí nos causan daño con los números que arrojan.
No han visto cómo con las uñas hemos logrado tener el Patronato Nacional de la Infancia en nuestro cantón, ni cómo hemos mejorado la seguridad en cada uno de los distritos, ni cómo hemos venido trabajando en conjunto con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en cada distrito, y con un grupo de la población con el propósito de lograr sacar adelante este cantón.
Estimados periodistas y medios de comunicación en general, quiero de verdad hacerles un llamado para que paren el amarillismo y sensacionalismo que le dedican a este cantón; que no hagamos el problema más grande y más bien seamos comunicadores de las buenas noticias, porque así no nos están ayudando.
Al Gobierno le hago un llamado nuevamente de solidaridad para este cantón y que nos brinde el apoyo que necesitamos para salir adelante.
