Columnistas

La apasionada y decidida Hilda

Hilda Chen Apuy deja como legado la huella profunda que plasmó en quienes la conocieron o estudiaron con ella.

EscucharEscuchar

Desde otra perspectiva, ponderaré aquí una elegía por Hilda Chen Apuy Espinoza, como complemento a la que José Ricardo Chaves plasmó hace unos días (14/12/17). Desembocaré reflexionando en la calidad de héroe a la que todos hemos de aspirar. En mi libro “Vigencia y vivencia del humanismo”, y bajo el título de “Humanismo con ‘h’ de Hilda”, ya ensayé una semblanza para hacerle justicia histórica. Continuo ahora, en lo posible, siempre con la misma clave.








En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.