Hoy damos el paso hacia un 2021 de incertidumbre, pero, también, de oportunidades.
Será el año para celebrar dos siglos de Independencia de España, pero, además, para verificar si somos capaces de independizarnos del eterno déficit fiscal, de la creciente deuda pública, de los salarios y pensiones de lujo de una élite de burócratas, y de la ineficiencia en la operación y servicios del Estado.
El problema de Costa Rica no es el sector privado. Es el público. Si estamos en crisis es porque el Gobierno Central, el Poder Judicial, el Poder Legislativo, las instituciones autónomas y demás entidades, con más 325.000 funcionarios, operan con costos insostenibles que obligan al inmortal endeudamiento.
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Tanta carga nos llevó, a empujones, otra vez, a tocar las puertas del Fondo Monetario Internacional (FMI). Tendremos que ir con una carta de intenciones que evidencie conductas responsables para levantar la economía. No hay opción. Si hacemos las del avestruz, el mundo financiero nos cierra puertas, como ocurrió hace 40 años con una crisis para jamás olvidar.
La oportunidad para salir adelante está en lo que proponga el Gobierno, pero, sobre todo, en lo que decidan los 57 diputados. Es la Asamblea Legislativa la que, con sus votos, definirá si pone orden, con la reforma al empleo público, a los disparatados salarios entre instituciones. Es también la que resolverá cuál será la propuesta al FMI.
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2021 es año complicado porque los diputados están en campaña para ganar votos para las elecciones del 6 de febrero del 2022. Sin embargo, esta será la oportunidad para que los electores conozcamos quiénes, y de qué partido, piensan más en aplausos que en fortalecer las finanzas públicas.
Son los diputados, solo ellos, los que tendrán la oportunidad de quitarle grasa al Estado y ponerlo a caminar sin «muletas», sin los recurrentes aumentos de impuestos. Este año nos abrirá los ojos para identificar a los populistas, a los irresponsables, pero también a los que tienen visión de país y no de partido político.
Dios quiera sea un mejor año, pero, tengamos claro: este 2021 lo hacemos cada uno y, en lo nacional, cada diputado, porque les llegó su oportunidad.