El país cumplirá doscientos años de vida independiente en este 2021, en uno de los momentos más cruciales de nuestra historia moderna.
La pandemia, el desempleo, el déficit fiscal y el fantasma de la recesión exigen en estos 365 días la toma de decisiones razonables, eficaces, creativas y, ante todo, patrióticas.
Por ello, en este año del bicentenario, estamos urgidos de líderes valientes que quieran retomar el espíritu visionario que inspiró a nuestros ancestros a abrazar la causa de la autodeterminación y la democracia.
LEA MÁS: Buenos días: Escapismo legislativo
Requerimos gobernantes, diputados, precandidatos presidenciales, empresarios, sindicalistas, académicos y ciudadanos capaces de anteponer el bienestar colectivo a sus intereses particulares.
La precampaña política representa, sin duda, una amenaza. Como atestiguamos en los últimos meses del 2020, el cálculo electoral puede esculpir poses funestas a la hora de tramitar proyectos clave en el Congreso.
Sin embargo, los diputados tendrán servida en bandeja de plata una oportunidad única, inconmensurable, de demostrar si ellos realmente quieren servir a los costarricenses o prefieren ser yes-men.
LEA MÁS: Buenos días: Detengan el relajo
El Gobierno también tendrá que remangarse para desplegar una ofensiva de diálogo y negociación con la Asamblea Legislativa, en procura de construir una ruta realista de reactivación económica.
Para ello tendrá que salir de las cuatro paredes de la Casa Presidencial y abrir un trillo de frecuentes visitas a Cuesta de Moras y a los representantes de los diversos sectores para dar todas las explicaciones requeridas sobre sus propuestas.
Muy útil sería involucrar a los expresidentes de la República y a otros líderes reconocidos en distintos ámbitos para construir un frente sólido que dé impulso a la buena toma de decisiones.
- En el año del bicentenario, estamos urgidos de líderes valientes que quieran retomar el espíritu visionario que inspiró a nuestros ancestros a abrazar la causa de la autodeterminación y la democracia.
Esto podría servir de antídoto contra las voces inescrupulosas que, sin dudarlo, intentarán bloquear toda solución que amenace sus intereses chuecos.
Hay mucho por hacer en este 2021. Ya no podemos perder más tiempo. A lo largo de este año, veremos quiénes se ponen la camisa blanco, azul y rojo y quiénes le dan la espalda al país.
rmatute@nacion.com