Cajeros del BN dañados
Los dos cajeros automáticos del Banco Nacional de Costa Rica (BN) ubicados en la Universidad Nacional, en Heredia, están dañados desde hace un mes. El otro cajero que está en la Municipalidad de Heredia también está fuera de servicio.
Mis suegros, dos adultos mayores a quienes les depositan la pensión en este banco, ahora deben ir hasta el cajero ubicado frente al parque de los Ángeles, a una distancia como de un kilómetro, en taxi. Le pedimos al Banco Nacional que solucione este problema.
Alejandro Espinoza, Heredia
Respuesta del INS
En relación con la carta “Cirugía en el INS” (19/1/2018) del señor Eloy Quesada, aclaramos que en el Hospital del Trauma del INS la programación quirúrgica se lleva a cabo a través de un análisis clínico que permite priorizar casos, no por orden de ingreso, sino según la condición de salud. En este caso, el paciente tiene otros padecimientos crónicos, como hipertensión, por lo que debió ser visto por varios especialistas, quienes solicitaron exámenes adicionales y se determinó que, antes de la cirugía, debía estabilizarse el paciente en aras de no poner en riesgo su salud. Debido a esto, su cirugía se atrasó dos días y fue operado, exitosamente, el 15 de enero.
En la Red de Servicios de Salud del INS estamos comprometidos con el bienestar de nuestros pacientes. A través de nuestro departamento “La Voz del Paciente”, ya contactamos a la familia de Quesada para explicarle lo actuado y ponernos a su disposición.
Víctor Pérez Ayala, Gerente INS-Red de Servicios de Salud
Gracias y consulta
Agradezco a la doctora Gabriela Castillo, jefa en Cardiología del Hospital Max Peralta, y a su secretaria, por atender mi petición para que me dieran el tratamiento que necesitaba.
Por otro lado, le pregunto a Krisia Díaz, directora de este hospital, ¿por qué a mi hijo lo trataron mal cuando fue a que le recibieran los documentos para solicitar mi tratamiento? Espero una respuesta.
Virginia Guerrero Loaiza, Cartago
Peligro para la salud
Para nadie son un secreto los peligros a los que se exponen los seres humanos cuando entran en contacto con los excrementos de palomas. La gravedad se ve reflejada en los techos de las casas y en la infraestructura de inmuebles en general, que se encuentran construidos cerca de los hábitats de estas aves. La piel, la vista, los pulmones, y en general el cuerpo humano, es más sensible que el cemento y el zinc.
Por eso, encuentro razón en que la directora del Área de Salud de Goicoechea, la Dra. Rosanna García, ordenara la suspensión de actividades en el parque de Guadalupe, y hasta haya amenazado con cerrarlo por completo, para evitar la permanencia de personas dentro del lugar mientras existan unas 150 palomas ahí.
Lo que me extraña es que esa misma orden solo exista para esta comunidad. No creo que sea abuso de poder, cuando de proteger a la población se trata.
Me llama poderosamente la atención que las otras áreas de salud del país no hayan movido ni un dedo para evitar enfermedades, incluso mortales, a los ciudadanos en general.
No he sabido de ningún ministro de Salud que amenace con cerrar lugares, como la plaza de la Cultura, donde se han contado más de 400 aves, o algún otro parque, donde pernoctan miles de estos animales.
Esa es parte de las inconsistencias de nuestro país, donde no se aplica la ley a todos por igual.
Daniel Madrigal Sojo, Goicoechea
Resultados secretos
El Centro de Desarrollo Estratégico e Información en Salud y Seguridad Social (Cendeisss) dio inicio en el 2017 a la evaluación de los egresados de Medicina para su incorporación a un hospital a partir del 1.° de enero de este año.
La prueba la calificó una empresa extranjera y la CCSS firmó una cláusula de confidencialidad cediendo el derecho del estudiante de revisar en qué falló y si la calificación estaba equivocada. Algunos acudieron a la Sala IV por supuesta violación del derecho de petición, información y defensa. Pero esta rechazó los recursos.
La lucha la están dando por la vía judicial y, seguramente, la ganarán y condenarán al Estado a daños y perjuicios. En este país se violan los legítimos derechos de los ciudadanos y hay que reclamarlos ante un juez. Entonces, ¿para qué sirve la Sala?
Miguel Herrera Ulate, Curridabat