El argumento de quienes rehúsan vacunarse es que tienen derecho a elegir. Es verdad, pero no es correcto ni solidario. Uno puede elegir tomar cuanto licor desee. Nadie está facultado para decirnos qué hacer con nuestras vidas. Ahora bien, en el momento en que alguien maneje ebrio, ya no está en juego solo su derecho, porque pone la vida de otros en peligro. Lo mismo vale para la vacuna. Al decidir no ponérsela, la vida de otras personas, el bienestar de la comunidad, del país y del mundo corren peligro.
Si la mayoría no se vacuna, el virus no será eliminado, y cuanto más esperen para inocularse, más probabilidades hay de que surjan otras variantes. Quienes no se vacunan tienen más posibilidad de contagiar a los demás, algunos más vulnerables o con ciertas condiciones que les impiden inocularse. Así, usted se convierte en el ebrio al volante.
Yvonne Chacón Soto, San José
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Solicitud ilógica
Compré dos juegos de luces de xenón en Repuestos la Guacamaya, en Escazú, y uno de los bombillos no funciona. Me recomendaron que lo llevara, y estando en el local me pidieron el resto del juego. Expliqué que lo tengo instalado; sin embargo, insistieron en que debía llevarlo completo.
Es ilógico desarmar el frente de mi vehículo; desinstalar todo para que me cambien un simple bombillo. De paso, le echan la culpa al proveedor.
Si les comprara todas las partes para armar un motor y me fallara el empaque del cárter, tendría que desarmar de nuevo el motor, echar todas las partes en un saco y entregárselas en el mostrador solamente para que me den un empaque nuevo, según la lógica de ellos. Una forma de evadir la garantía.
Minor Lhamas Matarrita, San José
Policía sin tecnología
Por ser un país pequeño y poco poblado, deberíamos contar con buena tecnología policial. Se requiere menos inversión que en uno más populoso; sin embargo, no es así. En otros países latinoamericanos, las patrullas tienen instaladas cámaras delanteras que detectan autos robados, lo cual termina en arrestos y juicios; también, computadoras, las cuales indican a los oficiales si una persona tiene causas pendientes con la justicia. Los policías también portan cámaras en el pecho, que encienden cuando dejan las patrullas, y armas paralizantes.
En nuestro país, los ministros se conforman con donaciones de motos y vehículos; ninguno se ha preocupado por equiparse de tecnología acorde con nuestro siglo.
Jorge Bernal Villalta Mora, San Francisco de Dos Ríos
Práctica deportiva
No hay duda de que el deporte construye mejores personas y mucho más. De niño disfruté en la escuela, el colegio y en un club de mi barrio la sana tarea de practicar varias disciplinas deportivas: atletismo, básquetbol, fútbol, tenis, natación y, mi deporte preferido y que jugué en la primera división de mi país de origen, el rugby.
Todos los deportes, de igual manera que me divertían, me alejaron de la siempre presente tentación de las drogas de todo tipo y sumaron a mi espíritu de estudiante aguerrido. Por eso, las olimpíadas siempre fueron mi momento culminante de alegría y emoción deportiva. Ver a los ídolos competir limpiamente siempre es emocionante.
Los nuevos ídolos que dejó esta olimpíada para Costa Rica son un ejemplo en su disciplina deportiva, de constancia y deseos de superación. Destacarlos y darlos a conocer con apoyo verdadero es una obligación del Estado y la empresa privada para que muchos sigan sus pasos en todos los terrenos de la vida.
Gustavo Halsband Leveratto, San José
Cambio en México
El gobierno de Manuel López Obrador cambió el nombre a la plaza donde se encuentra el árbol de ahuehuete al pie del cual Hernán Cortés habría llorado después de su derrota del 30 de julio de 1520.
Ahora es la plaza de la Noche Victoriosa. Con el respeto que me merecen los ciudadanos mexicanos, discrepo de la medida. Cortés lideró una masacre en México. Por la codicia del oro fue un genocida, complacientemente respaldado por España y las autoridades religiosas de turno.
Es vergonzoso. Debió nombrarse la plaza del asesino que lloró porque sintió que el oro se le esfumaba. No me convence el argumento de la Coordinación Nacional de Memoria y Cultura de México, que con esta acción honra también a quienes murieron en la masacre del templo mayor y a los pobladores. Honor a los mexicas, quienes se enfrentaron a las armas de fuego con arcos y lanzas.
Manuel Jiménez Navarrete, San José