Qué frustrante la paralización de las necesarias ampliaciones de la Circunvalación norte, que, con cuarenta años de retraso, fueron retomadas bajo la eficiente gestión del ministro Rodolfo Méndez Mata, funcionario insignia de esta administración.
Dichosamente, un trámite burocrático despertó la indignación contra la postura de un funcionario que, con una actitud prepotente y apegándose a una legislación, con solo una simple llamada a los involucrados, habría solucionado el problema.
Muy cómodo, desde su escritorio, se regodeó en sus minutos de gloria, pero hizo a un lado los legítimos intereses del país y el riesgo que la decisión significó.
Indignación ciudadana es lo que genera la salomónica actitud y pone en entredicho a la institución que representa, que tan eficiente labor realiza.
Es hora de replantear la misión de los funcionarios, de todo nivel, a fin de establecer qué es lo prioritario y conveniente de cada una de sus actuaciones para no perjudicar las mejores intenciones y necesidades de Costa Rica
Milton González Castro, Tres Ríos
Nunca generalicemos
Como profesor universitario, con una trayectoria de 27 años en este campo, no puedo pasar por alto las manifestaciones hechas por Soledad Rojas Rodríguez (Cartas, 9/4/2021).
En mi caso, siempre mantengo comunicación más allá del tiempo de clase con mis alumnos, sin importar que se trate de un curso presencial o virtual. Mis alumnos son los mejores testigos de que esto es así.
Rojas afirma que los profesores universitarios nos hemos decantado por las clases virtuales, lo cual, no es cierto. Primero, no hay que olvidar que seguimos en tiempo de pandemia y, segundo, nosotros solo somos empleados, así que recibimos de parte de nuestro empleador la indicación de la forma como se trabajará.
Y, luego, se pregunta: «¿Les habrá quedado muy cómodo estar en la casa recibiendo el mismo salario por un esfuerzo menor?».
Al decirlo en forma general, me siento aludido y herido. Además, con su pregunta también ofendió a todos aquellos empleados, profesores o no, que actualmente realizan teletrabajo. Lo virtual no necesariamente significa trabajar menos.
No pongo en duda que haya quienes no cumplen su labor docente con el compromiso y entrega que se debe. Eso ocurre tanto virtual como presencialmente.
Álvaro Villalobos Serrano, San José
Ideas electorales
El 6 de febrero del año entrante habrá elecciones nacionales. Dentro del cronograma establecido por el Tribunal Supremo de Elecciones no se menciona nada sobre las necesidades de coordinación con el Ministerio de Salud.
Conviene definir anticipadamente muchas cosas, porque el proceso será muy diferente a los anteriores. Cómo prevenir las aglomeraciones en los alrededores de los centros de votación, cómo se mantendrá el distanciamiento en las filas en la entrada de cada recinto, si se mantendrá el uso de bolígrafo o crayón, cómo nos lavaremos las manos, etc.
Por otra parte, ¿se harán pruebas a los fiscales y miembros de las mesas receptoras de votos para asegurarnos de que ninguno es asintomático o está contagiado?
Considero que una posible solución es disponer de un mayor número de centros de votación, de tal forma que exista suficiente separación entre las aulas. Analizo todo esto para decidir pronto si trabajaré en esa fecha como auxiliar electoral.
Jaime Morera Monge, Alajuela
La Contraloría
El editorial de La Nación de este 9 de abril expone con claridad las acciones obstruccionistas de la Contraloría General de la República al desarrollo de este país. En lugar de contribuir a la tarea, coloca obstáculos reglamentarios absurdos.
Cuando se habla de reforma del Estado, debería iniciarse por analizar la función no solo de la Contraloría, sino también de la Defensoría de los Habitantes y la Sala Constitucional, ¿en qué contribuyen al bienestar del país?
Recordemos que, en lo referente al hueco fiscal heredado de la administración anterior, la Contraloría aprobó el presupuesto omitiendo la confirmación del contenido.
Gustavo Elizondo Fallas, Santa María de Dota