La visita a Rusia el miércoles y el jueves del primer ministro griego Alexis Tsipras, en plena negociación con sus acreedores internacionales, provoca la suspicacia de sus socios europeos, que temen que Atenas busque nuevos horizontes diplomáticos.
La visita a Rusia el miércoles y el jueves del primer ministro griego Alexis Tsipras, en plena negociación con sus acreedores internacionales, provoca la suspicacia de sus socios europeos, que temen que Atenas busque nuevos horizontes diplomáticos.