Los anteriores diputados mandaron a colocar sus retratos en las antiguas curules, como si el hecho de ser los últimos ocupantes del recinto les confiriera un mérito particular
Cada excongresista pagó ¢58.000 por una foto suya enmarcada, para colocar en las viejas curules, por ser los últimos en utilizarlas
Administración de la Asamblea conversó con el presidente legislativo la mañana de este miércoles y recordó que el decreto sobre uso de tapabocas se mantiene.
A última hora, un diputado desistió de la idea y dijo que le regalaría el retrato a su mamá.
Una cuarta parte de los invitados se ubicará en el plenario legislativo.
Un Directorio aprobó que la Asamblea pagara por los retratos, pero algo cambió los planes.
Departamento de Prensa y Protocolo advirtió a presidenta legislativa de que era urgente apagar los equipos de transmisión, porque el sistema de enfriamiento dejó de funcionar.
A diferencia del resto de trabajadores públicos y privados, los diputados no presentan incapacidad para pedir permisos remunerados por razones de salud. Esta es la explicación de la presidencia de la Asamblea Legislativa.
Este lunes renunció la diputada María Inés Solís, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), tal como leyó la presidenta de la Asamblea Legislativa, Silvia Hernández, en una nota.
Apenas empezando la semana, el plenario no reunió la cantidad mínima requerida para trabajar: 38 presentes.