Un buen adiestramiento evitará accidentes, como atropellos, pero también dará al dueño control físico del can en pro de una convivencia armoniosa con el resto del entorno.

Los son exploradores por naturaleza. Los actuales paseos con correa vinieron a sustituir esos largos recorridos de las manadas salvajes, pero siguen cumpliendo con el objetivo de satisfacer la necesidad de descubrir nuevos territorios.

Caminar con el perro es una actividad que no debe tomarse a la ligera. Los canes disfrutan pasear con sus dueños y unas cuantas previsiones evitarán que se apague la alegría de la mascota.