Jerusalén vivió el martes su jornada más sangrienta desde el inicio de la actual ola de violencia, con un balance de tres israelíes muertos en dos atentados, mientras que del lado palestino murió un joven en Cisjordania.
Jerusalén vivió el martes su jornada más sangrienta desde el inicio de la actual ola de violencia, con un balance de tres israelíes muertos en dos atentados, mientras que del lado palestino murió un joven en Cisjordania.