Quizá no sea la pista de Daytona, o la de Montecarlo, pero sí brinda una gran diversión a los pequeños que desean convertirse en pilotos de autos de carrera y también a aquellos que solo quieran pasarla bien.
Quizá no sea la pista de Daytona, o la de Montecarlo, pero sí brinda una gran diversión a los pequeños que desean convertirse en pilotos de autos de carrera y también a aquellos que solo quieran pasarla bien.