Siempre es bello evocar a esta inmensa figura, que reconcibió el arte de la danza y creó la modernidad. Su vida fue una vorágine de éxtasis y agonías, pero todo valió la pena: Isadora es imperecedera.
Siempre es bello evocar a esta inmensa figura, que reconcibió el arte de la danza y creó la modernidad. Su vida fue una vorágine de éxtasis y agonías, pero todo valió la pena: Isadora es imperecedera.