La atención de la pandemia por covid-19 disparó los gastos del fondo nacional de emergencias en el 2020. Después de la pandemia, el mayor impacto por emergencias lo causó la influencia indirecta del huracán Eta, que afectó nuestro territorio durante la primer semana de noviembre.

Taludes, puentes, alcantarillas en carreteras de todo el país, sufren con cada temporal, tormenta o huracán las grietas de un mantenimiento apenas paliativo.

Servicio Nacional de Salud Animal detalló que unos 1.000 siguen afectados en el Pacífico central y sur y que 14 murieron o están desaparecidos como consecuencia de las lluvias.