El riesgo para los trabajadores del sexo se multiplicó en los últimos meses desde que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) los dejó, aseguran, sin las consultas de vigilancia de enfermedades venéreas.
El riesgo para los trabajadores del sexo se multiplicó en los últimos meses desde que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) los dejó, aseguran, sin las consultas de vigilancia de enfermedades venéreas.