A dos minutos del amanecer la portezuela bajo sus pies se abrió. Una fuerza lo jaló y lo suspendió en el vacío. ¡ Hasta el diablo se asustó cuando lo vio llegar !
A dos minutos del amanecer la portezuela bajo sus pies se abrió. Una fuerza lo jaló y lo suspendió en el vacío. ¡ Hasta el diablo se asustó cuando lo vio llegar !