El cómo hicieron al Herediano campeón nacional de fútbol es digno de una película. Pero más lo son las vidas del entrenador José Giacone y su hermano y asistente, Diego, desde que dejaron su natal Argentina para aventurarse en Costa Rica: dos décadas de desencantos, batallas, desesperación, milagros, absurdos, risas y triunfos. Esta es la historia no contada, la que no se ve en la cancha.