No era difícil de prever que la crisis de los cubanos se saldría de control.
La muerte de un cubano por gripe AH1N1 disparó la alarma entre las autoridades de salud de Panamá, que han reforzado la vigilancia entre los casi 1.000 migrantes varados en la frontera de este país con Costa Rica, informó este martes una fuente oficial.
El canciller de Nicaragua, Samuel Santos, afirmó este miércoles que Costa Rica no ha comunicado interés en resolver mediante el diálogo la crisis en sus fronteras por el flujo de migrantes cubanos que buscan cruzar la región en su camino hacia Estados Unidos.
El canciller, Manuel González, convocó a sus pares de la región para buscar una salida a la crisis de migrantes cubanos que se aglomeran en territorio costarricense, frente a la frontera con Nicaragua, en su intento por viajar hacia Estados Unidos.
A las 9 a. m. del domingo, una multitud de migrantes cubanos se adentró en tierras nicaragüenses desde Costa Rica por el puesto fronterizo de Peñas Blancas. “¡Queremos seguir, queremos seguir!”, gritaban al unísono.
El canciller de la República, Manuel González, afirmó esta mañana que los gobiernos centroamericanos toleraban que redes de tráfico trasladaran a migrantes cubanos por Centroamérica, en su viaje hacia Estados Unidos.
Un grupo de 50 cubanos obstruyó alrededor de las 11 a. m. el paso vehicular por la frontera de Costa Rica con Nicaragua, en el puesto de Peñas Blancas.