Hace falta entrenamiento para desarrollar habilidades, destrezas y conocimientos acordes con la cuarta revolución industrial.

No basta con tener ingenieros diestros en el desarrollo de ‘software’ si carecemos de un cuerpo docente con los conocimientos necesarios para aplicar las nuevas tecnologías al proceso educativo

No resulta extraño que en tres países de avanzada economía y consecuente tecnología se haya pensado en crear ministerios de la soledad