Ningún otro coctel se ve, sabe o huele así: efervescente, dulce y ligeramente picante. El clásico de los bares estadounidenses conquista paladares en San José y es perfecto para adornar un buen vodka ruso.
Ningún otro coctel se ve, sabe o huele así: efervescente, dulce y ligeramente picante. El clásico de los bares estadounidenses conquista paladares en San José y es perfecto para adornar un buen vodka ruso.