Asdrúbal Calvo recibía el doble de dinero por incentivo de prohibición según su grado académico; en Municipalidad de Garabito también se pagaron ¢86 millones de más en anualidades, según Contraloría.
Resultados de diagnóstico salarial revelan que el plus por antigüedad genera una dinámica ‘gravemente inequitativa y potencialmente insostenible’.
Según la Contraloría General de la República, en el 2020, el gasto en pluses salariales cayó, por primera vez en 10 años, un 0,1 % respecto del período anterior.
El sistema de incentivos creado por la Universidad privilegió los incrementos salariales ‘vegetativos’, como la anualidad o el escalafón, ‘en detrimento del mérito académico’.
Comisión interna advirtió que el fuerte incremento en anualidades que hizo la administración del 2010 generó ‘efecto indeseado’ y provocó desigualdad entre empleados con una misma función
Informe interno revela que Contraloría Universitaria alertó en 2009 de que sistema de pluses sobredimensionaba pago por antigüedad; aun así, cúpula subió anualidades, lo que generó gasto desproporcionado.
Entre el 2010 y el 2017, los pagos por anualidades y escalafón pasaron de ¢22.800 millones anuales a casi ¢60.000 millones al año por una decisión ‘ilegítima’ y meramente ‘política’.
La decisión fue tomada por la Junta Directiva de la institución este jueves, según indicó el presidente ejecutivo de la Caja, Román Macaya
El texto también las habría exonerado de la regulación del incentivo de anualidades; por unanimidad, cinco legisladores de la comisión de Asuntos Municipales dictaminaron negativamente el plan.
Medida ahorrará al Estado ¢101.100 millones, equivalente a 0,28% del PIB.