María Francisca Mayorga tiene más de un año viviendo con su nueva identidad; afirma que ha sufrido menos prejuicios, pero que todavía hay quienes que la llaman señor.
María Francisca Mayorga tiene más de un año viviendo con su nueva identidad; afirma que ha sufrido menos prejuicios, pero que todavía hay quienes que la llaman señor.