La exigente normativa que los productores deben cumplir, el alto costo de ponerla en marcha, los pocos incentivos, la competencia desleal y el mercado pequeño frenan la expansión de la agricultura orgánica en Costa Rica.
La exigente normativa que los productores deben cumplir, el alto costo de ponerla en marcha, los pocos incentivos, la competencia desleal y el mercado pequeño frenan la expansión de la agricultura orgánica en Costa Rica.