La empresa costarricense Fantasy Rooms se mantiene renovando sus servicios para hacer felices a sus clientes y que nadie se quede sin disfrutar de uno de los mayores placeres de la vida: la sexualidad
Los moteles han sido desde siempre espacios para encender la pasión y el erotismo y para vivir el sexo si tabúes. ¿Cómo se han renovado estos negocios en los últimos años y qué de nuevo ofrecen a sus públicos?
Por allá, bien lejos de la cama, quedan colgados los prejuicios y las vergüenzas. Aquí, reinan el juego y la sensualidad, elementos claves que en estos cuartos de fantasía le pueden dar un giro a su rutina diaria.