Los Cleveland Cavaliers se montaron sobre los hombros de LeBron James para ganar la Conferencia del Este por cuarta ocasión seguida y clasificarse a su cuarta final de la NBA en forma consecutiva.
Podría haber sido el último partido de local para LeBron James en Cleveland. Y si lo fue, fue también otra real exhibición del Rey, que lideró este viernes el triunfo 109-99 de los Cavaliers sobre los Boston Celtics, para forzar el sétimo partido de la final de la Conferencia Este de la NBA.