El campo de aterrizaje más corto del país es dominio de un solo y pintorezco hombre. A borde de un Cessna 206 y desde hace 27 años, Álvaro Ramírez vence los peligros de un arriesgado y temido descenso. ¡La experiencia es deliciosamente extrema!
El campo de aterrizaje más corto del país es dominio de un solo y pintorezco hombre. A borde de un Cessna 206 y desde hace 27 años, Álvaro Ramírez vence los peligros de un arriesgado y temido descenso. ¡La experiencia es deliciosamente extrema!