Seidy Salazar nunca había sentido tanto miedo. Mientras su hijo estaba intubado en el Hospital Nacional de Niños, ella permanecía aislada en el albergue para indígenas Carmen Lyra, donde fue asustada por los vecinos.
Seidy Salazar nunca había sentido tanto miedo. Mientras su hijo estaba intubado en el Hospital Nacional de Niños, ella permanecía aislada en el albergue para indígenas Carmen Lyra, donde fue asustada por los vecinos.